Flor de chasna

La flor de chasna, también conocida como tajinaste rojo, es una planta endémica de las Islas Canarias, específicamente de la isla de Tenerife. Se trata de una especie de la familia de las campanuláceas, que se caracteriza por su imponente y colorida floración.

Esta planta ha sido objeto de admiración y estudio desde hace siglos. Los antiguos habitantes de las islas, los guanches, ya la utilizaban para diferentes propósitos, tanto medicinales como ornamentales.

Incluso se dice que los guanches le daban un carácter sagrado y la consideraban como un símbolo de la fuerza y la belleza de la naturaleza.

Hoy en día, la flor de chasna sigue siendo una de las especies más emblemáticas y representativas de la flora canaria.

Su nombre científico es Echium wildpretii y es una planta herbácea que puede alcanzar hasta 3 metros de altura. Su tallo es robusto y cubierto de pelos ásperos, mientras que sus hojas son alargadas y de un intenso color verde.

Sin embargo, lo que más destaca de esta planta es su espectacular floración. La flor de chasna florece en primavera y verano, y sus flores son de un intenso color rojo que contrasta con el verde de la planta.

Cada flor tiene una forma de campana y puede medir hasta 2 centímetros de largo.

Además, su néctar es muy apreciado por las abejas y otros insectos polinizadores. La flor de chasna es una especie que se adapta muy bien al clima y las condiciones de las islas Canarias. Se encuentra principalmente en zonas de montaña, entre los 1000 y 2500 metros de altitud, y en suelos volcánicos.

Aunque también se puede encontrar en otras islas del archipiélago, su presencia es más abundante en Tenerife.

Además de su belleza y su importancia en la biodiversidad de las islas, la flor de chasna también tiene propiedades medicinales. Se utiliza principalmente para tratar afecciones respiratorias, como la tos o el asma, ya que posee propiedades expectorantes y antiinflamatorias.

También se le atribuyen beneficios para el sistema digestivo y circulatorio.

En cuanto a su uso ornamental, la flor de chasna es muy apreciada por su capacidad para embellecer jardines y parques. Sin embargo, su cultivo no es sencillo y requiere de cuidados especiales, por lo que es.